Los líos de Torrecillas con la justicia

Francisco Torrecillas saliendo de los juzgados.

El hasta este momento alcalde de Albox, Francisco Torrecillas, está dando los últimos manotazos de ahogado. A la espera del resultado electoral (que no parece favorable al regidor), lo que verdaderamente le compromete en el horizonte es su actual situación judicial. 

Solo por el asfaltado ilegal de la Rambla, la justicia le pide 7 años de cárcel y un total de 27 años inhabilitación, al apreciarse según la opinión del Fiscal, posibles delitos de prevaricación, malversación y contra la ordenación del territorio. Con argucias judiciales la nueva defensa del regidor ha logrado postergar la fecha, que hasta ahora el juzgado sigue sin señalar, pero el juicio se avecina. 

El Caso Rambla II, las obras del convento y la opacidad ante requerimientos documentales de la oposición socialista, entre otros, son temas de calado judicial, y en este sentido los albojenses ya saben lo que sucede.

El antecedente inmediato es reciente. La justicia inhabilitó a Rogelio Mena por negar a la oposición su derecho de fiscalización y fruto de aquella situación, Torrecillas logró alzarse con la alcaldía del municipio. En el mejor de los casos y de los resultados electorales, la historia en Albox puede repetirse. Si Torrecillas se impusiera en las elecciones del próximo domingo, su posible inhabilitación le espera a la vuelta de la esquina. Si eso fuera así, inhabilitado Francisco Torrecillas, su sucesor natural en las listas es el número 2 de UCIN, Fermín Moreno Torrente, quien cogería la vara de mando municipal.

Los albojenses tienen en sus manos el destino de su pueblo para los próximos cuatro años. Pueden apostar por una política minúscula, de concejal de obras, sin ninguna ambición ni proyección, o darse la oportunidad desde este mismo lunes de comenzar a construir un Albox de futuro. PSOE y PP, presentan dos candidatas sobradamente preparadas para dirigir el demorado ingreso de Albox al siglo XXI.

Los albojenses tienen la oportunidad de dejar atrás el enredo, la mentira, el miedo y la manipulación. Porque a pesar de la voluntad del regidor por seguir mintiendo a los vecinos en sus últimas apariciones en redes sociales, solo ha conseguido que se demuestre que falta a la verdad.

Torrecillas miente, cuando habla de querer arreglar la rambla y no lo dejan, porque tiene los permisos. Concretamente dos; uno desde hace tres años y otro desde hace 14 meses.

Torrecillas miente cuando dice que el asfaltado de la Rambla fue denunciado por el PP, cuando él mismo confesó en un Pleno Municipal que obraba sin permiso porque le daba la gana. Las tres denuncias existentes fueron realizadas por la Guardia Civil. Ante la confesión pública de un delito, aun sin denuncia ninguna, la Fiscalía debería haber obrado de oficio.

También falta a la verdad cuando dice que la Junta de Andalucía le da largas para legalizar el Polígono de La Venta, porque hace más de un año que se le ha solicitado al Ayuntamiento de Albox un informe medioambiental que no ha aportado.

Más de lo mismo con el Centro de Salud. Albox no tiene un nuevo Centro de Salud, porque el Ayuntamiento no ofreció un terreno a la Consejería. Ante esta situación, la Junta ha destinado 2,3 millones en reformas para un centro sanitario que se ha quedado pequeño. Lo paradójico es que un nuevo centro de salud, con parking y 5.000 metros cubiertos, cuesta cuatro millones de euros, que la administración estaba dispuesta a aportar.

El futuro del edil oscurece con el paso de las horas y su destino está marcado. La primera decisión del pueblo de Albox, es el domingo. La localidad ha perdido protagonismo y su tejido industrial y empresarial han desaparecido. Los líos judiciales de Torrecillas, no deberían significar cuatro años más de atraso y falta de desarrollo. El pueblo tiene la palabra.