La consejera de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, Loles López, ha asistido este jueves, acompañada por la delegada del Gobierno, Aránzazu Martín, al Foro Provincial de Innovación Social en Almería, donde ha destacado los casi 1,8 millones de euros destinados a 14 proyectos de este ámbito en la provincia. En el acto, dirigido a las entidades sociales almerienses, la consejera ha ensalzado el potencial del tercer sector y la encomiable labor que realizan uniendo cercanía y profesionalidad con las nuevas tecnologías.
Uno de los objetivos de este foro es reunir a profesionales, personas expertas y a las entidades sociales participantes en las líneas de subvenciones para la transformación social y la innovación en los servicios sociales del ejercicio 2023 puestas en marcha por la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad y que son sufragadas con fondos europeos. En concreto, la provincia de Almería cuenta con 14 proyectos, ocho de ellos de innovación social que han contado con 1,23 millones de euros y seis de transformación tecnológica que han dispuesto de 505.000 euros, que suman casi 1,8 millones de euros.
Ante esto, la consejera ha remarcado la labor e implicación de las entidades locales y del tercer sector que han diseñado los proyectos, poniendo de manifiesto el buen hacer y la sensibilidad de los profesionales de los servicios sociales. “Con este foro ponemos en valor el trabajo de profesionales comprometidos, la coordinación y la unidad. Además, con el conocimiento de los diferentes proyectos se fomenta la ayuda entre unos y otros, así como el conocimiento”, ha proseguido López, que ha destacado la alta participación en esta convocatoria de subvenciones. De hecho, en toda Andalucía se han destinado 46,5 millones para un total de 303 proyectos.
Proyectos con alma
Los avances tecnológicos, que llevan una velocidad vertiginosa, pueden mejorar la atención a las personas más vulnerables. “Con estas herramientas y proyectos llenamos de corazón las nuevas tecnologías”, ha apostillado la consejera, quien ha destacado “el alma y el corazón” de cada una de las iniciativas presentadas. Por ello, ha dado las gracias de nuevo al tercer sector.
Menores migrantes
En cuanto a las iniciativas impulsadas, en la provincia de Almería se han llevado a cabo proyectos destinados a mejorar la vida y la inclusión social de las personas migrantes, de las personas con discapacidad, entre otros colectivos sociales como las personas en situación de dependencia.
Entre ellos, destaca el proyecto de la asociación Engloba Integración Laboral, Educativa y Social titulado ‘Programa referentes de mentoría social con juventud ex-tutelada’, el cual ha contado con 681.000 euros. Busca responder a la demanda de los servicios de protección a la infancia y la adolescencia de ayudar a los chicos y chicas a hacer su transición a la vida adulta. Se persigue ayudar a esos menores, una vez se convierten en adultos, a construir su proyecto personal.
Como ha remarcado la consejera, la realidad de los menores que migran solos es “muy preocupante” y Engloba hace una labor muy importante con la figura de los mentores ya que en ese camino de cambio hacia la vida adulta, cargado de inseguridades e incertidumbres, las personas mentoras serán acompañantes de jóvenes de 18 a 23 años sin apoyo familiar en Andalucía”, por lo que les sirven “de respaldo y apoyo”.
En este punto, hay que destacar también que de los seis proyectos de transformación social subvencionados en Almería, cinco van dirigidos a entidades que trabajan con personas con discapacidad que van a agilizar mucho la gestión y la atención del día a día de estas personas y sus familias. Se trata de iniciativas como la de la Fundación Poco Frecuente, Asociación Comarcal Murgi, Aspapros, Asociación almeriense de Daño Cerabral (Vivir) o la Asociación Verdiblanca.
También en el ámbito de la discapacidad y la dependencia, se encuentra un proyecto pionero en Andalucía como es el de cuidados intermedios de la Federación Almeriense de Asociaciones de Personas con Discapacidad (FAAM), el cual empezó de la mano de otro similar puesto en marcha por las consejerías de Inclusión Social y de Salud para prevenir la dependencia.
“Todos estos proyectos tienen algo en común: son ejemplos de cómo las nuevas tecnologías, la innovación y los nuevos modelos de intervención social pueden mejorar la atención a las personas más vulnerables. La combinación entre tecnología y corazón multiplica los buenos resultados”, ha concluido.